miércoles, 2 de abril de 2008

Me estás atrapando otra vez

Ariel Rot y M-Clan.- Me Estas Atrapando Otra Vez



·Ariel Rot:

Me despierto pensando,
Si hoy te voy a ver,
Pero es inútil negarlo,
Tú me estás atrapando otra vez.

·M-Clan:

Eres un ángel maldito,
Eres la dama cruel,
Un arma de doble filo.

·Dúo:

Contigo solo puedo perder,
Tú me estás atrapando otra vez.

·Ariel Rot:

Y aunque alguien me advirtió,
Nunca dije que no,
Y ahora tengo que esconder,
Las heridas.

·M-Clan:

Y ese pulso que jugué,
Y porque quise lo perdí.

·Dúo:

Ya nunca me podré alejar de ti.

·Ariel Rot:

Te extraño, cuando llega la noche,
Pero te odio de día,
Después, después me subo a tu coche,
Y dejo pasar, dejo pasar la vida

·M-Clan:

Yo debería dejarte,
Irme lejos no volver,
Pero es inútil negarlo.
Tú me estás atrapando otra vez.

·Dúo:

Contigo solo puedo perder.

·Ariel Rot:

Y aunque alguien me advirtió,
Nunca dije que no.

·Dúo:

Y ahora tengo que esconder,
Las heridas.

·M-Clan:

Y ese pulso que jugué,
Y porque quise lo perdí.

·Dúo:

Ya nunca me podré alejar de ti,
Ya nunca me podré alejar de ti,
Tú ya lo sabes bien,
Nunca me podré alejar de ti,
Tú ya lo sabes bien,
Nunca me podré alejar de ti,
Tú ya lo sabes, ya lo sabes, ya lo sabes bien,
Nunca me podré alejar...



Érase una vez una historia interminable entre una princesa de un cuento de dragones, y un príncipe que se creía rana.

La princesa vivía en un palacio enorme, lleno de comodidades y de lujos, pero aun así,
aunque quizá no lo sabía, ella no se contentaba.

Un buen día, el príncipe que se creía rana llegó al palacio de la princesa. En comparación con el suyo, el reino de ella le ofrecía un sinfín de oportunidades que jamás se habría imaginado, por lo que decidió quedarse allí por un tiempo. Poco a poco, fue conociendo cada rincón de aquella maravillosa tierra, hasta fijarse en lo más hermoso que esta ofrecía. Su princesa.

Pero, como sucede en toda buena historia que se precie, los logros que merecen la pena no se consiguen tan a la ligera, ya que, si no, no habría ninguna historia que contar, ya que nadie la recordaría. El príncipe, furioso por no poder conseguir lo que anhelaba a la fuerza, declaró la guerra al reino de ella, la cual respondió también a los ataques y embestidas que este le ofrecía con más furia, aun si cabe.

Durante más de cuatro años los dos reinos batallaron sin descanso, ya que todo intento de tregua o pacto se veía mermado por el orgullo de uno o de otro. Las malas lenguas hablaban de que, en el fondo, ambos se divertían con aquel juego de poder, y que no atendían a razones simplemente por el puro placer de poner a prueba a su contendiente.

Nunca se supo quién la acabó, ni quién salió ganando, pero los ecos de la batalla aun resuenan por cada rincón de esos reinos...


Esta canción habla de esos cuatro años de guerra...

¡Que no cunda el pánico! Mi reino quedó bastante derruído como para pensar en un ataque sorpresa ^^

2 comentarios:

RoOoOo dijo...

Muy chula esta cancón, hoy la escuché en el coche ^^

Anónimo dijo...

Paz.. Djate D Tanta Guerra...Aunq Es Bonito en :$