miércoles, 27 de febrero de 2008

Enter The ÐATRIX


A estas alturas no me sorprendería nada que aporrearan la puerta de buenas a primeras para que pudiese seguir al conejo blanco. Nada en absoluto. Porque después de lo de anoche empiezo a pensar que esto no puede ser verdad.

Pocos minutos después de haber contado mis miedos por primera vez, me tuve que enfrentar a la personificación de ellos como jamás me había enfrentado, y aun ahora, al día siguiente, aun puedo sentir la sensación de frío que me invadía, y cómo mi cabeza me pedía que parara mientras que la sinrazón me obligaba a seguir ahí, viendo como en cada frase se me desgarraba aquello que más había querido.

No soy El Elegido... pero anoche hice méritos para convertirme en algo grande. Así que, por favor, encuéntrame y sácame de aquí...

Bang Bang... My Baby Shot Me Down...

1 comentario:

RoOoOo dijo...

Follow the Blondies ^^

A ver la estatua que nos encontramos en Madrid... ainssss
¿Qué hacemos contigo?

Muak!